La UE ha cambiado la legislación del empleo de los parabenes
Los parabenes conservantes de empleo controvertido.
En este blog ya se ha hablado en varias ocasiones de los controvertidos parabenes.
Los parabenes o parabenos son conservantes que impiden y limitan el crecimiento de microorganismos como bacterias y hongos.
Son baratos y se necesita poca cantidad de ellos para lograr su efecto inhibidor, por lo que su popularidad ha aumentado en gran medida. En estos momentos se encuentran en casi cualquier cosmético convencional.
¿Por qué son tan controvertidos?
Está demostrado que existe absorción sistémica, es decir que aunque se apliquen sobre la piel, los parabenos penetran en el cuerpo, circulan por sangre, pueden ejercer acciones tóxicas sobre el organismo y, finalmente se excretan por orina.
Además se han encontrado altas concentraciones de este tóxico en tejidos tumorales mamarios, y se ha podido poner de manifiesto su capacidad como disruptor endogénico.
Situación legal actual de los Parabenes
Los parabenes prohibidos
Desde octubre de 2014 cinco parabenos han sido prohibidos por la Comisión de la Unión Europea para ser empleados en cosméticos:
-
Isopropylparaben.
-
Isobutylparaben.
-
Phenylparaben.
-
Pentylparaben.
-
Benzylparaben.
-
Isobutylparaben (Sales).
Disminución de la concentración máxima del resto de los parabenes en cosmética
Respecto al Propylparaben y Butylparaben se disminuye la concentración máxima permitida en un cosmético hasta el 0,4% en caso de emplear uno aislado y hasta el 0,8% en el caso de mezclas.
Prohibición de emplear estos parabenes en la zona del culito del bebé
Por su peligrosidad y su toxicidad se prohíbe explícitamente el uso de estos conservantes en los productos destinados a la limpieza del cambio de pañal.
También en este blog se ha hablado del riesgo que supone este tipo de ingredientes en la limpieza al encontrarse en las toallitas de bebés.
Opinión de NaturalSensia sobre los parabenes
Esta restricción y la prohibición del empleo de parabenos en cosméticos se han tomado por los riesgos que conllevan para la salud pública.
Aplaudimos la prohibición de alguno de ellos, y la limitación de uso en los productos para el cambio de pañal del bebé, pero nos quedamos perplejos al pensar que algo que es tóxico en el culito de un bebé no lo sea en la cara de una embarazada.
Y nos congratulamos de la alternativa de la auténtica cosmética natural.