Cada vez hay más personas que en vacaciones de verano deciden sustituir la playa por la montaña.
Si se pasan unos cuantos días en el monte, conviene prestarle atención a la piel que en esta situación puede sufrir.
La cosmética natural puede presentar múltiples soluciones.
Protección solar
Es imprescindible que cuando se sale a la montaña y empezamos a alcanzar determinadas alturas se proteja la piel de las radiaciones solares, dado que la posibilidad de quemarse la piel aumenta con los metros que se ascienden.
Las gafas de sol son imprescindibles, asegurándose que son de calidad para filtrar correctamente los rayos de sol
Además y tras acabar la marcha conviene emplear un After sun que permita regenerar la piel, rehidratarla y captar los radicales libres que se hayan podido generar por el sol.
Hidratación
El aire que suele hacer en las cumbres puede secar la piel hasta dañarla. Por eso es bueno que la protección solar que se emplee contenga además aceites y mantecas para minimizar ese mencionado daño. Y se debe complementar con alguna loción o leche que contenga elementos nutritivos.
No se deben olvidar los labios, que por lo expuestos que están, y por lo fina que es su piel corren el riesgo de agrietarse y de secarse.
Cuidado de piernas y pies
Cuando se camina si se hace largo tiempo y además por empinadas pendientes tanto para arriba como para abajo nuestras piernas y pies se resienten.
Lo primero es que se debe emplear siempre el calzado y la ropa adecuada al esfuerzo que se vaya a llevar adelante.
Conviene darles el merecido reconocimiento a con un masaje bien ganado con un buen aceite como el de árnica o reparar alguna posible molestia muscular con el bálsamo sueco.
Cuidado de las manos
Cada vez más gente se acompaña de bastones para caminar y el sujetarlos repetidamente hace que las manos también sufran las consecuencias de este agarre continuado, por lo que una crema de manos suele ser bastante útil.
Repeler mosquitos
Otros de los enemigos de una buena salida al campo pueden ser las picaduras de mosquitos para evitarlo conviene repelerlos.
Desodorante
El esfuerzo puede dejar su huella. Para que los demás no carguen con las consecuencias de ello, es conveniente emplear algún desodorante eficaz y natural.
La cosmética natural para dejar el monte como está
El que sale al monte y disfruta de la naturaleza, es el primer interesado en dejarla tal y como está, sin llevar a cabo nada que pueda modificarla o destruirla.
El empleo de productos solares con filtros químicos, o el uso de cosméticos con derivados sintéticos, que pueden liberarse en el agua de un río si nos refrescamos en un baño, producen un impacto mucho más allá de lo que sería deseable.
Se disfruta mucho más de la naturaleza, con algo natural acariciando nuestra piel.