A continuación os remitimos el artículo que nos ha enviado Ainhoa Mendizábal, creadora de Esencias de Luna para presentarnos su marca.
Primera marca de cosmética termal certificada en España
En los productos naturales de Esencias de Luna, se conjugan tres ingredientes fundamentales: el agua termal, el aceite de oliva virgen extra BIO, y las propiedades de las plantas de una Reserva de la Biosfera. Sí, el valle de Luna fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 2004. Esencias de Luna apuesta por la creación de productos de calidad con ingredientes de su entorno más cercano.
Cosmética termal sin productos peligrosos para la piel
En su afán por cuidar las pieles más sensibles, no incluyen colorantes ni perfumes a sus jabones; con el fin de evitar cualquier tipo de reacción. El resto de los productos llevan sólo aceites esenciales naturales (en su mayoría de cultivo ecológico), que los convierten en la opción indicada para niños y personas con alta sensibilidad en su piel cómo aquellos que sufren dermatitis, psoriasis, eczemas, etc.
La marca ha sido certificada por BIO Inspecta como Biológica, orgánica o ecológica (los tres términos son sinónimos); y ha sido recientemente incluida en el directorio francés Slow-Cosmétique (galardonada con una estrella) por su método artesanal y ecológico de producción.
El agua termal de Caldas de Luna y su balneario
Las aguas termales arrastran minerales procedentes de las capas más profundas de la tierra, que no poseen el resto de aguas. Cada agua tiene su propia composición, fruto de su recorrido hacia el exterior. En el valle de Luna, en plena Cordillera Cantábrica, a 1100 metros de altitud nace un agua termal de propiedades reconocidas desde comienzos del siglo pasado. De hecho, estas aguas oligometálicas, ferruginosas, bicarbonatadas mixtas fueron declaradas minero-medicinales mediante Real Orden del 28 de mayo de 1917. Junto a las aguas se desarrolló en aquel tiempo un Balneario que en la actualidad, ya reformado, ofrece todos sus beneficios al visitante.
En este balneario se ofrecen tratamientos (por el momento sólo algunos) con la línea de cosmética natural termal de Esencias de Luna. Pero no ha sido ésta marca quien ha descubierto los beneficios del agua termal. Numerosas firmas de cosmética como Vichy, Biotherm, Avène, Larroche-Posay,… ya han aprovechado aguas termales de diferentes composiciones, como base de sus productos.
No hay que olvidar que un cosmético suele contener en torno a un 60-70% de agua. Las aguas termales de Caldas de Luna tienen especial efecto en pieles sensibles. Ello movió a los creadores de Esencias de Luna a crear su propia firma de cosmética. En este caso, la prioridad fundamental era crear una gama de productos de alta calidad, ecológicos, a un precio asequible para todos los públicos. Esencias de Luna toma el agua directamente de la fuente pública, antiguo lavadero del pueblo, para elaborar su producción.
Las purezas de las plantas del valle de Luna
Esta declaración premia la pureza del aire y del agua que aportan a los productos, pero premia también la biodiversidad del entorno. Caldas de Luna se halla en la zona de contacto entre dos zonas climáticas, la mediterránea y la atlántica; aportando especies de ambas. Hayas, abedules, rosales silvestres, cola de caballo… y plantas, en general de zonas más húmedas, pueden convivir con lavandas, tomillos y romeros. Utilizamos malvas, caléndulas, cola de caballo, hiedra, abedul, rosa mosqueta, lavanda, romero … y el aceite de oliva virgen extra BIO: apuesta por un aceite de calidad indiscutible.
El uso cotidiano de los productos de Esencias de Luna sirve, no sólo para curar, sino para prevenir afecciones de la piel que, por desgracia, y debido a la gran cantidad de químicos nocivos en nuestro entorno, abundan cada día más en nuestras familias.