El poder curativo de esta planta es de sobra bien conocido con cuatro acciones farmacológicas:
- antiinflamatoria.
- espasmolítica, o antiespasmódica es la capacidad de relajar un músculo ya sea liso (involuntario como los del tracto digestivo) o esquelético.
- calmante.
- carminativa, capaz de eliminar gases.
Todo esto es gracias a su riqueza en principios activos: aceites esenciales, como el famoso azuleno, el bisabolol, y las cumarinas, flavonoides y mucílagos.
Acciones sobre la piel
Reepitelizante y cicatrizante.
Regenerante de pieles sensibles o irritadas.
Acciones sistémicas aplicado sobre la piel
Al ejercer sus acciones gracias a las propiedades de los aceites esenciales, estos tienen capacidad de penetrar y ejercer esta acciones calmantes, carminativas, espasmoilíticas y antiinflamatorias en el sistema digestiva cuando se aplican mediante masaje.
La manzanilla posee varios nombres botánicos sinónimos:
- Anthemis nobilis.
- Anthemis odorata.
- Chamomilla nobilis.
- Matricaria nobilis.
- Ormenis nobilis.
El nombre de manzanilla procede de su olor al aplastar su flor con los dedos percibimos un olor muy similar a la manzana. La palabra matricaria, proviene de que esta planta se la consideró como la madre de las plantas y es una planta muy relacionada con patologías femeninas.
La parte activa son los capítulos florales que posee poder espamolítico para las menalgias e incluso en infusión como solución antiséptica para lavados vaginales.
Historicamente el poder curativo de esta planta ya queda reflejado en muchos documentos desde los egipcios a los germanos, pasando por romanos y griegos.